Gary Lineker, mítico delantero inglés que jugó con el Barcelona, acuñó una frase en 1986 que hasta hace nada parecía una realidad irrevocable o al menos difícil de contrarrestar, aquella de “el fútbol lo juegan 11 contra 11 y al final gana Alemania”, dicha desde la propia experiencia del ex jugador en contra de los teutones como selección y también los difíciles equipos germanos.

Ahora que se encuentra en la inactividad y disfruta desde los micrófonos como analista y comentarista del fútbol, es testigo de cerca de cómo evoluciona este deporte y cómo cada día aparecen nuevos jugadores, distintos a los de su época y dispuestos a marcar la suya propia como ya lo hizo el inglés.

En medio de esa evolución, su frase volvió a escucharse pero con alguna modificación. “El fútbol es un deporte en el que 22 jugadores tienen la pelota durante 90 minutos y al final gana el equipo que tiene a Messi”, en referencia al dominio absoluto del argentino en la recién finalizada Copa América.

Líder en goles, en asistencias, en regates y MVP del torneo, Messi colocó la guinda con el título de campeón que consiguió en Brasil y ante los locales, en el estadio Maracaná, una noche realmente histórica en la que se unieron todos los factores adversos posibles para dar un golpe en los libros del fútbol mundial.

Ahora que por fin se quitó el estigma de ser campeón con su país, Messi se dispone a disfrutar de unas merecidas vacaciones en las que podrá estar con su esposa e hijos, además de desconectar un poco de las constantes preguntas sobre su renovación, que todavía está en el congelador del Camp Nou esperando respuesta.

Laporta, optimista

Pese a vencerse el tiempo de contrato y renovación, causando que Messi sea un nuevo fichaje en caso de quedarse en el Barcelona, el presidente Joan Laporta sigue en la senda del optimismo, convencido de que finalmente se resolverá todo en favor del club y con un mensaje constante: “avanza positivamente”.