Un ingreso que estará en el orden de los 240 a 320 millones de euros será lo que ingrese la Federación a razón de la Supercopa de España, torneo que se jugará en Arabia como parte de la expansión del fútbol nacional a destinos exóticos. La medida que ya criticó Kroos hace unos meses, se extiende mucho más.

Luis Rubiales llegó a un acuerdo para extender el intercambio existente con el torneo en Arabia con duración de 8 años más, hasta 2029, esperando ver a los cuatro mejores equipos de cada temporada en la disputa por convertirse en Supercampeón de España, algo que consiguió el Athletic de Bilbao en la 2021.

Para la próxima temporada jugarán los finalistas de la última edición, Bilbao y Barcelona, mientras que el 1 y 2 de LaLiga completan el cuadro, con Atlético de Madrid y Real Madrid respectivamente para la disputa del torneo. Esta medida, vuelve a jugar en contra de muchas opiniones en España para este torneo.

El hecho de jugarlo fuera del país ya levanta polvo en medio de todo el debate público, tanto por no contar con fanáticos españoles como por la cantidad de ingresos y puestos de trabajo que se generan en otro país con un producto nacional, algo que muchos jugadores no entienden y tampoco comparten.

Tampoco los viajes son un factor que convenza a los jugadores de los equipos, que siguen por la labor de cumplir con los compromisos que tiene su club y defender el escudo al que pertenecen, pero al mismo tiempo, están en contra de viajes adicionales para jugar partidos de alta intensidad que amerita un viaje de regreso instantáneo.

Dinero y nada más

La medida responde de forma exclusiva a intereses económicos, ya que el nivel de los equipos no ha sido precisamente superior por cambiar de sede, además de tener gastos mayores en cuanto a protocolo.